ElMonito se declara en huelga

Querido diraio
Hoy me declaré en paro, o sea que no voy a ir al colegio ¡porque no cumplen! Voy a puro escribir con la linternita mi diraio de vida, pero no es un diraio de mujeres, en vez que es un diraio de hombres, o sea que no hay amor.
(El tío abre la puerta del closet).
-¡Qué haces dentro del closet, gaznápiro!
-Es que tuavía me estaba levantando, querido tío señor Lamordes.
-¡Pero las clases empezaron hace rato!
-No, tío, porque el Baeza me dijo ayer que hoy nuabía clases porque la escuela sigue en paro y descués los grandes defilaron y la tía Ernestina iba con un cartel y el señor López iba con otro cartel y el inpestor Pino iba con otro cartel.
-Vaya vaya. Profesores e inspectores recogiendo las castañas con la mano del gato y tratando de sacar su tajada. ¿Y qué decían los carteles?
-Decían parece que bajara el petrólio.
-¡Bruto! Ese es otro paro, más delicado aún.
-Verdá, tío, tiene razón, porque yo le dije al Toro que los colegios no comen petrólio porque en la hora de colación dan galletas, pero no son tan ricas. A mí me gustan más las papas fritas del tiosco de la guatoncita.
-¿Así le dicen a la señora del quiosco?
-Claro, porque es guatona y tiene antiojos, pero el antiojo de la parte de acá tiene un vírio quebrado pero igual ve, pero ve quebrado la guatoncita del tiosco.
-Hemos llegado a la hora de la verdad.
-¿Qué es la hora de la verdá, tío?
-La hora en que me debes decir qué haces dentro del closet y por qué no has ido a clases.
-Es que me estaba levantando recién porque anoche me despertaba a cada rato, ¡es verdá, no es mentira! Descués me quedé dormido en la mañana cuando me iba levantar y descués cuando me disperté entonces yo creo que ya habían empezado la marcha de paro, así que me salvé justito, porque el Martínez me dijo ayer que se mojó en la marcha, pero no se mojó de guanaco porque se mojó de lluvia. Yo me salvé, pero quero ir al paro porque es divertido.
-¡Qué sabes tú! Aprende mejor de tus comentaristas del blog.
-¿Qué dijeron?
-Algo acerca de la libertad de expresión, según entendí.
-¿Qué cosa es libertad de expresión, querido tío?
-Eso. Libertad de expresarse. Libertad para decir lo que quieras.
-¿Cuedo decir lo que quiera?
-Bueno, di lo que quieras.
-Huevón maricón cu...
-¡Animal!
-¡Por qué!
-Te aprovechas.
-¡Pero usté dijo!
-Claro que dije. Pero hay límites. No puedes decir cualquier cosa. No se trata de eso.
-¿Pero entonces qué cosas no cuedo decir?
-No puedes decir ninguna ofensa contra los demás.
-Entonces no vale. Yo quero decir garibatos.
-Aprovecha para decir lo que piensas de la educación, por ejemplo.
-La educación, por eflenco, es aburrida y tan bien las tías son muy viejitas. Yo quero que sean más bonitas y que usen vestido y tan bien quero que usen medias caladas, porque una vez una tía de cambio llegó con medias caladas y me dio la elestricidá. Tan bien quero que la hora de gicnasia sea más larga y que dure dos horas, no una pura hora, y que al final no tenga que bañarme en la ducha porque es agua helada, además que una vez el Toro se rió porque me vio el pirulín y el Toro dijo que tenía el pirulín muy chico, entonces mejor me baño en la casa de usté porque hay agua caliente y es más rico. Da una cosa en la espalda y descués canto hartas canciones.
-No se puede hablar contigo. Dices demasiadas barbaridades en un solo párrafo. Mejor sigue escribiendo tu diario...