Jazán versus El duende Tatá

Ahora que ni tío ya me dijo que no me iba llevar al Cajón de Maipú estoy aburrido porque no voy a ir al Cajón de Maipú, en vez que de nuevo me voy a tener que quedar solo como un pobre y triste ElMonito mientras tanto que los demás niños juegan con sus padres o juegan con sus amigos o juegan con sus compañeros de culso, y yo estoy aquí solo como un perro, no, porque los perros persiguen a los gatos, entonces ya no están tan solos los perros en vez que yo no cuedo perseguir gatos, porque los gatos corren más fuerte porque los gatos son ágiles.
Ni tio dijo que no podía ir al Cajón de Maipú porque tenía cosas más importantes que hacer, entonces yo le pregunté qué cosas son las cosas importantes y me dijo que las cosas importantes son:
LISTA
1.- Leer el diraio, eso es lo más importante. Por qué, le pregunté, porque ahí salen las películas que dan en la noche por el cable, me dijo.
2.- Ir al supermercado a comprar carne para hacer asado y tan bien comprar vino para tomar vino cuando está haciendo el asado y descués para tomar vino cuando está comiendo asado y descués para tomar vino cuando está sentado en el sillón con los amigos. Son casi todos periodistas.
3.- Comprar bebidas para la semana, y tan bien maní y papas fritas. Yo le dije tan bien comprar Trencito, y dijo que eso no es tan importante, es como el número 10 de importante.
4.- Ir al Servipac a pagar una cuenta de la luz o de teléfono, parece que dijo.
5.- Dormir siesta escuchando un partido de fútbol.
6.- Conversar con los amigos en la noche en el lívin.
7.- Ver películas de mujeres piluchas. Yo le dije ¡Tío, eso no se hace porque es malo!, y me dijo cállate gusano qué sabes tú, quédate callado será mejor, así me dijo.
8.- Eso no más. Yo le pregunté que faltaban dos números para llegar al número 10 pero me dijo "eso no más".
Por eso en veces yo no quero ser grande, quero ser chico porque los grandes son más aburridos que los chicos porque los grandes puro queren tomar vino y comer carne y estar sentados y las señoras grandes puro queren ir a la peluquería y al Mol Plaza Despucio, mientras tanto que yo lo que mas quero es ir al Cajón de Maipú para elevar volantines porque elevar volantines es rico, lo más rico es cuando el volantín se empieza a encumbrar y entonces yo le tiro el hilo bien fuerte para atrás y el volantín suena en el cielo como que se se va rajar y no se raja, y es rico cuando suena. Tan bien me gusta saltar riítos, en vez que los grandes van caminando tranquilos porque los grandes son tranquilos y los chicos son no tan tranquilos. Yo soy no tan tranquilo.
Ahora ní tio fue a comprar las cosas y yo estoy solo de nuevo, por eso ahora quero ser grande porque los grandes cueden manejar y cueden pasar los cambios y cueden apretar el aceleradón, y tan bien cueden doblar curvas, eso es rico.
Voy a tener que inventar un cuento para no aburrirme.
JAZÁN VERSUS EL DUENDE TATÁ
Un día el duende Tatá estaba asustando a los niños cuando llegó Jazán, Jazán venía en una nave espacial y estaba vestido con brazos como de aluminio y tenía un cinturón con teléfono cerulán y una espada láser y en la cabeza tenía un casco puntudito. Entonces el duende Tatá desapareció y descués salió por atrás de Jazán y le mascó la axila. Jazán dijo ¡Auch! y se asustó y voló al espacio pero descués volvió a la tierra, como diez minutos descués. Entonces no venía solo, ¡venía con un ejército de robots! y cuando bajó a la tierra el duende Tatá volvió a desaparecer porque estaba en apuros.