-Tío, dice un programa que un curita que se llama Carabina era no tan bueno, o sea que era malo. Parece que le disparó a unos señores deligreses cuando eran chiquititos, porque ahora son grandes, pero no se murieron porque la bala parece que les pasó raspando.
-Así es.
-Pero los curitas son todos buenos, porque ninguno es malo.
-¿Quién te dijo eso?
-En el catecismo de la otra vez salió en la Bíulia que todos los curitas son buenos, porque ninguno es malo.
-¿Recuerdas qué decía el catecismo?
-No también porque cuando iban leyendo la Bíulia yo estaba jugando a las bolitas para callado con el Toro. Pero el curita decía parece que todos los que leen la Bíulia son buenos y los que no leen la Bíulia son no tan buenos, o sea que son malos.
-Pero que yo sepa, tú no lees la Biblia.
-Es que yo soy chico.
-¿Entonces la Bibilia es para que la lean los grandes?
-Claro, porque cuando los grandes leen la Bíulia se ponen más buenos, mientras tanto que cuando los chicos leen la Bíulia se aburren porque salen muchos santos.
-¿Y los santos son aburridos?
-Claro po, ¿no ve que lo santos andan calladitos y ni se mueven? Se mueven puro para ir a rezar y descués que van a rezar entran a la pieza y se ponen a rezar de nuevo.
-Ah.
-Entonces los curitas son buenos, pero salió que un curita era no tan bueno.
-¿Qué hacía fuera de disparar la carabina?
-Cosas malas.
-Qué cosas.
-No vi también porque el Martínez me dijo que me tapara los ojos, pero parece que el curita le dijo al deligré, le dijo ¡Viva el diaulo!
-¿Eso le dijo?
-No sé. No, parece que le dijo que no hiciera las tareas y que en vez de hacer las tareas vieran los partidos del Mundial.
-¡Qué malo!
-Sí, no era tan santo. Así que a lo mejor se lo van a llevar a la cárcen.
2 comments:
Cuando yo era niña tenia un misalito para niños con el que podiamos seguir la misa, entonces en latin, y en el que detras tenia la vida de algunos niños santos, niños que sufrian tremendas calamidades para proteger la Ostia, para protegerse de la lascivia de los romanos o para llevar la comunión a algunos presos cristianos. Estas historias estimulaban mi imaginación y deseaba no tanto ser cristiana como vivir todas esas aventuras valerosas. Asi que El Monito creo que la vida de los santos no tendria que ser tan aburrida.
Santa Teresa( por poner un ejemplo) que se escapaba de casa para luchar a los moriscos desobedeciendo a su padre. La imaginaba saliendo de casa embozada en mitad de la noche, acompañada de su hermano menosr que tiritaba de miedo, En una noche gelida como son las de las tierras de Avila, escondiendose detras de los arboles, caminando por senderos estrechos...etc etc.
Un abrazo
mucho tiempo sin leerte ElMonito... ojalá estés bien, o sea no estés mal
me recuerdas mucho al Lindorfo, ese que repite las cosas, o sea que dice las cosas de nuevo
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