-¿Tienes el trompo?
-Aquí está.
-Se enrolla así, ¿ves?
-Sí.
-Y se lanza así... ¡ug!
-Ja ja ja, le salió chueco tan bien.
-Espera, no te burles. Déjame hacerlo de nuevo... ¡Ug! ¿¡Ves ahora!?
-Le salió derechito. ¿Cómo se hace, querido tío señor Lamordes?
-Como te enseñé. Hazlo tú ahora.
-No cuedo.
-Trata.
-Bueno ya.
(Al minuto).
-¡No me sale!
-Repite el procedimiento, haz un nuevo esfuerzo hasta que lo logres.
-¡No me sale!
-Ya verás que te va a salir. Es cosa de práctica y paciencia.
(A la hora).
-Tío...
-Qué.
-Mejor juego al Pleistechon.
-¡Gaznápiro impaciente!
-Mañana sigo practicando porque el Moisés Alvarado dijo que no va ir a clases porque dijo que iba hacer la cimarra y descués iba ir a clases, como el viernes dijo. Así que el viernes ya voy a ser un esperto.
-¡No! De aquí no te mueves hasta que hagas bailar al trompo.
-¡No es justo!
(A las dos horas).
-¿Aprendiste?
-Tuavía no.
(A las tres horas).
-¿Ya?
-No... ¡Maltrato infantil!
-Lo hago por tu bien.
-¡In-jus-ticia!
(Por la noche).
-¿Ahora sí?
-No, porque se me hizo un callo en la mano tío con la cuerda del trompo, así que se me refala el trompo en la mano y me sale chueco.
-Acuéstate, mañana seguimos.
-Bueno... hummm... zzz... zzz... zzz...
1 comment:
Tiene razón El Monito eso son trabajos forzados.....
Recuerdo que cuando aprendió a bailar el trompo, mi hijo decidió que el mejor sitio era en la estación de metro que había justo debajo de casa, un día le mande a buscar fruta a la esquina y desapareció por horas...venga a buscarlo y buscarlo, hasta que por fin subió tan contento las escaleras con su trompo. !!!! !!!Ag!!! !que susto! !casi le mato!
Un abrazo
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