Monday, July 18, 2005

¡Castigado!

Lunes 18, los niños viajan felices en el Metrotrén junto a sus papás rumbo al Zoológico de Buin. Se nota que están de vacaciones de invierno. El zoológico es un hervidero y los pequeñines olvidan el frío no debido al sol de invierno sino a la emoción de ver animales tan de cerca.
Pero ElMonito tendrá que conformarse con verlos en el recuerdo, en su memoria, ya que esta vez ni siquiera puede sintonizar el Animal Planet. Ahora mismo está castigado, tal como temía, dentro del fatídico closet en que pasa sus peores días cuando el tío encuentra que se ha portado mal.
Reflexiona lleno de miedo acerca de la oscuridad, la soledad, el abandono, la maldad de los mayores, la propia culpa, todas vivencias que no se quisiera ni el más frío e insensible de los comandos.
A veces le resbala una lágrima por la mejilla. No logra controlarla y le sale sola. Está sentado y cruza sus manos alrededor de sus piernas. De afuera escucha la voz de su tío.
-¿Viste lo que te pasó por sacarte malas notas?
Se le antoja una voz cruel. Intenta responderle, pero no le salen las palabras. Su tío agrega:
-Yo te lo advertí, bien clarito. Te dije que te quedarías sin zoológico si la libreta venía mala.
-Pero tío, yo no sabía Nabuconodosor, osea que me la sabía pero se me le olvidó y por eso me saqué un dos...
Su tío no lo escucha porque ahora está preparando sus escritos en la computadora, que queda bastante lejos del closet donde lo tiene castigado. Íntimamente, sin embargo, su estado tampoco es de los mejores. En su corazón se libra una batalla desde que encerró al títere de orejas largas. "Está sufriendo, pero le hará bien. Le servirá para poner más dedicación a sus materias'', piensa mientras teclea. Pero no pasan dos minutos y el pensamiento cambia. "No lo merece, después de todo es sólo niño; ¿o es que acaso yo no tuve malas notas también?"
Al caer la tarde el arrepentimiento vence al espíritu didáctico que aloja en él y abre el closet.
-Ya. Ven conmigo. Ha sido suficiente.
ElMonito no contesta. Duerme arrinconado, a sobresaltos.
-Despierta, ElMonito. Te voy a llevar esta noche a mi casa.
-Ah, tío, estaba soñando un sueño con la Era del yelo que vi en el Canal 13. Yo iba con el mamú y el tigre con colmillos y descués nos refalábamos por el yelo. ¡Era riiiico!
-¿Se te pasó la tristeza?
-No tanto. ¿Verdá que me va llevar a la casa de usté?
-Sí, vamos.
-¿Va a estar la Lunita y la Vale?
-Sí.
-¿Los cuede llevar a los tres al Sológico de Buinsó?
-Recuerda que estás castigado. Como mucho te saqué del closet. Ni sueñes con eso.
-Chuta, fregué no más. Qué se le va hacer. Pero lo importante es que a lo mejor la Lunita tiene láminas de la Guerra de las Galasias y me las cambia por las repetidas, ¡chuta, ojalá que tenga la 25!

2 comments:

Q said...

Pucha ElMonito, para la próxima entrega te sacas mejores notas, hará más sol y podrás ir al BuinSó con tu Tío Lamordes y la Tía que te da la electricidá, ya verás que mejora todo. Si tienen la 25 me la guardas?, es la que me falta... que bueno que ya no estas castigado.

Pequeñin said...

Pucha ElMonito, tu tío lamordes es un malo, bien malo, ¿como por un simple 2 te va a castigar? Eso no se hace. Ojalá que no lo vea en la calle, por que le voy a pegar y te vas a quedar sin tío, sin ese viejo malo.. y así mejor yo te cuido y te llevo al buinsó.

Chau Elmotino, cuidate.

El Monstruo del 18 de Octubre

-Tío... -Qué. -Dicen en el matinal de Megavisión que mañana va llegar el Moutro del 18 de Ostubre . -Te dije que no vieras los matinales. -...